Crepúsculo en campos de Borja
(A Aitor, los grafos de la luz)
Desgarraron con furia
La piel árida de su viejo mundo,
Las grietas sabias de la vida se ríen
De la lozana piel celeste,
Que fragua una cálida sonrisa
Dorada por los leños ardientes
De la muerte
Del rey del día.
Me asombra el frío gris que lo abraza,
Sin embargo,
Anhelo ver la luz del farol nocturno,
Aunque su traje de reina cubra el dolor
Reseco
de los brazos desnudos.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio